El diario de Oier
Inicio > Historias > Fiebre y fiesta
Fiebre y fiesta
Para una vez, al menos este año, que se puede ir a la playa, no se me ocurre otra cosa, que tener fiebre. Original que es uno. Resulta que el Viernes cogí uno de esos virus misteriosos, que en dos o tres días se van sin dejar rastro, y me pasé, Viernes y Sábado con fiebre. Y aunque el Domingo hizo bueno, pues por si acaso, no me llevaron a la playa.
Menos mal que había fiestón en Deusto, por el día de las ikastolas, y allí me fui. Hinchables a mogollón, juegos para todas las edades, talleres para pintar, maquillarse, o aprender a andar en zancos, txoznas para degustar talo y beber txakoli o sidra, payasos, conciertos... Lo dicho, un fiestón. Y sol. Muuucho sol. Además, el recinto es de asfalto y no tiene sombras (En Zorrozaurre, para el que lo conozca), con lo que la temperatura subió, pero que muchos grados. Hasta pusieron mangueras para que la gente se mojase, no digo más. Yo salí con un globo, una careta de una vaca, una camiseta y un cuento. Y una sudada de aúpa. Menos mal que fue cerca de casa, y no teníamos que andar mucho, porque no me puedo imaginar lo que tuvieron que sufrir los que vinieron de otras partes (cada año se celebra en una capital (Donostia, Gazteiz y Bilbao), hasta que llegaron a sus casas. Un horror. Pero lo que fue la fiesta en sí, fue todo un éxito, a pesar de que mucha gente se iría a la playa. Como hubiese hecho yo de no tener fiebre :-( Feliz Lunes de caló. Sí, caló, como en Sevilla. Hay 26º, y sólo son las 9 am. A ver si no se estropea el aire. Oier ¶ 2004-06-07, 01:00 | 0 comentarios |
Referencias (TrackBacks)
URL de trackback de esta historia http://oier.blogalia.com//trackbacks/19282