Antes de nada, un pequeño recuerdo para los afectados del 11M, a un año vista de la tragedia. ¡Cómo pasa el tiempo!

Bueno, a lo que iba. Ayer dormí con mi izeko Nagore. Y os preguntareis, ¿Y eso? Pues resulta que los pingos de mis aitas se fueron de concierto (unos tal Quireboys), y a servidor, en vez de llevarle, con lo que me gusta la música (xurica que digo yo), pues me dejaron en casa con la excusa de que soy muy pequeño, va a haber mucha gente, es muy tarde, ... Paparruchas, que decía aquel. El caso es que querían irse solos, y punto.

Pero no pasa nada. Porque yo me lo pasé fenómeno, y cené tortilla de patata y unos ositos de gominola, que saqué en plan soborno ;-))

Y así hemos llegado al Viernes. ¿A que se os ha pasado rápida la semana?

Saludos,

Oier ¶